
¿QUIÉN ES ÚRSULA BENINCASA?




Úrsula Benincasa Fundadora de las
Religiosas Teatinas de la Inmaculada Concepción
Nace en Nápoles, Italia el 21 de octubre de 1550, hija de Jerónimo y Vicenta, desde niña da muestras de amor a Dios fuera de lo común, y al prójimo, como a ella misma.
En mayo de 1582: Visita al Papa Gregorio XIII en Roma, por mandato divino, pidiendo la reforma de costumbres del Clero de la época. Una comisión, entre la cual se encontraba San Felipe Neri, fue nombrada para probar, durante siete meses su virtud y ver si el Espíritu que la guiaba era el Espíritu de Dios.
Sufrió humillaciones, tortura, secuestro, maltrato, aislamiento forzado, entre otros tormentos, y de todo salió airosa, por gracia de Dios.
La humildad sin límite es uno de los distintivos grandes de Madre Úrsula. Enamorada del Señor, todo sufrimiento le parecía poco, comparado con el gran dolor que por amor, sufrió El.
En 1583 fundó la Congregación de Oblatas de la Santísima Concepción (hoy Teatinas), y quería que sus hijas pudieran estar en contacto con las jóvenes que acudían al Monasterio en calidad de educandas, (pionera en querer la formación de la mujer).
El 2 de febrero de 1617 tuvo un éxtasis (se extasiaba solamente al escuchar el nombre de Dios, se encuentra entre las personas estigmatizadas), después de la comunión, en el que vio a la Santísima Virgen con su hijo en los brazos, el cual le pidió que fundara un Monasterio de clausura en aquel lugar, en el que las religiosas vistieran de azul y blanco y se dedicaran a la oración en completo retiro del mundo.
Antes de morir encargó su obra a los PP. Teatinos, quienes en 1533 aceptaron el encargo, motivo por el cual desde entonces, el nombre de Oblatas de la Concepción fue sustituido por el de Teatinas de la Inmaculada Concepción.
Cercana ya su muerte, dictó, por inspiración divina, las reglas que regirían la vida de sus hijas, ya que ella había vivido más de 30 años en la Congregación, sin más regla que el amor.
Entre otros consejos que dejó, dio algunos como testamento que dicen: "Evitad las culpas ligeras, si no queréis caer en las grandes" Y su último encargo fue el del amor" Amaos unas a otras. Respetaos mutuamente". "Que quiera una lo que quiere la otra".
Murió el 21 de octubre de 1618, como santa y patrona de su ciudad natal.
Hoy, 391 años después de su muerte, su obra continúa, su carisma de encarnar el mandamiento del amor, sigue vivo en cada una de sus hijas.